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¿Buscas una experiencia de playa serena y pacífica rodeada de la belleza de la naturaleza? No busques más que esta impresionante playa. Después de un largo viaje por el país, estaba escéptico sobre el impacto que una playa podría tener en mí, especialmente en el ventoso mes de marzo. Sin embargo, al llegar a esta playa, inmediatamente me llené de una sensación de magia y espiritualidad que parecía lavar cualquier dolor o estrés que había estado llevando conmigo. La belleza de este lugar es verdaderamente un testimonio de la gracia de Dios, y no pude evitar levantar un vaso a su majestuosidad mientras contemplaba las impresionantes vistas. Aunque el costo de la gasolina para llegar aquí puede parecer intimidante, la experiencia de contemplar una puesta de sol impresionante lo hace valer todo. Esta playa es un recordatorio de que a veces las mejores cosas de la vida realmente son gratuitas. Gracias, Malibú, por brindar una experiencia tan bendecida e inolvidable.
El paisaje en este lugar es absolutamente impresionante. La costa es inmaculada y hay menos personas alrededor, lo que lo convierte en una experiencia más serena. Sin embargo, encontrar un lugar de estacionamiento puede ser un poco desafiante.
Durante nuestro reciente viaje a la playa, el estacionamiento resultó ser un desafío para mis compañeros y para mí. Espero compartir mi experiencia para ayudar a otros a evitar las mismas dificultades. Llegamos un sábado por la tarde para encontrar el área circundante inundada de autos y conductores que no eran tímidos al expresar su impaciencia. Hay dos estacionamientos en las cercanías, uno cerca de la entrada que se llena rápidamente y cobra $3 por hora. El otro, a una cuadra de distancia, cobra $15 por día y ya estaba lleno para cuando llegamos a las 11:30 a.m. Algunos autos estaban esperando una plaza para abrirse. Recomiendo enérgicamente no estacionar en el tramo de acera entre los dos estacionamientos a lo largo de PCH, ya que esta área no está designada para estacionar y muchos autos recibieron multas durante nuestra visita. En cambio, encontramos estacionamiento legal en la calle al otro lado y un poco más abajo, lo cual estaba a 7 minutos caminando de la playa. Esta área se puede localizar buscando el Hospital de Animales de la Costa de Malibú en el GPS. Aunque todavía estaba ocupado, encontramos que el estacionamiento adicional en la calle era menos estresante y más espacioso, sin límite de tiempo siempre y cuando no estacionáramos durante la noche (el estacionamiento solo está restringido desde la medianoche hasta las 5 a.m.).
Esta playa es ideal para nadar y hacer paddle boarding, con sus aguas tranquilas, especialmente cerca del muelle de Malibú. Hay dos estacionamientos cercanos, uno en PCH y Cross Creek Rd, y otro justo al lado de la casa museo Adamson en dirección al muelle de Malibú. Desde el estacionamiento de la entrada de Cross Creek, es un agradable paseo para llegar a la laguna, pasando por el Punto de Refugio de Peregrinación de Amrikha en el camino hacia la playa.
La playa era verdaderamente impresionante, con vistas impresionantes que capturaban la esencia de la belleza natural. Es un paraíso para los surfistas, con aguas turbulentas que ofrecen un emocionante desafío. Sin embargo, el agua es bastante fría, perfecta para aquellos que buscan un chapuzón refrescante o un rápido baño para refrescarse.